miércoles, 5 de mayo de 2010

A PROPOSITO DE INDEPENDENCIAS. DEPENDIENTES O INDEPENDIENTES

A PROPÒSITO DE INDEPENDENCIAS
DEPENDIENTES O INDEPENDIENTES
En este mundo globalizado e interconectado, donde el conocimiento, la información y desinformación fluyen sin mayor control y están dispuestas de mil formas. Es necesario como educadores advertir y brindar los elementos necesarios a los estudiantes para que no sean vulnerables a las diferentes formas de esclavitud que campean en este tiempo.
Hablo de los vicios como: el alcoholismo, el tabaquismo, drogas como; marihuana, coca, bazuco, pegante, éxtasis y otras, el sexo, el peinado, las llamadas tribus urbanas, el fanatismo al futbol, a la religión, la música, telenovelas, emisoras de radio, partidos políticos o filosofías anárquicas mal entendidas, que en nada contribuyen a la formación de seres maduros y equilibrados que contribuyan a su bienestar y mucho menos al contexto social, cultural y político que los rodea. Se necesita que los jóvenes reflexionen y entiendan que en la medida en que sigan haciéndole el juego al consumismo a la moda a las propuestas que reciben de los medios como: la radio, la televisión, el internet los amigos y descuiden su verdadera formación y educación para enfrentar los retos que demanda cada vez mas este mundo globalizado y competitivo, cuando despierten a la realidad quizá sea tarde y pongan en riesgo no solo su calidad de vida sino la de sus hijos, muchos de ellos fruto de todo lo antes mencionado, sin medir las consecuencias que esto conlleva.
Es necesario proponer modelos y soluciones al problema de la educación que propendan realmente por la formación de un ser integral donde no prime solo el ser competente en el engranaje de una sociedad de mercado, sino un ser crítico y propositivo frente a las verdaderas necesidades personales y de su contexto social, que propenda por la defensa de sus derechos, de su territorio e identidad cultural, del entorno natural, fauna, contaminación ambiental de todo orden y niveles de convivencia que conlleven a vivir en armonía y valoración del otro como parte fundamental de su propia vida.

Es necesario que la educación se piense como una herramienta de formación holística y consciente de las necesidades de cambio de visión de un mundo mas humano y solidario con los mas necesitados, que lleve a acortar la brecha entre los mas poderosos y los mas débiles cambiando las relaciones de poder tendiendo a que estas sean mas iguales y horizontales, donde cada quien aporte lo mejor de si mismo para el bien de todos, donde prime el bien general sobre el particular, donde el dinero no sea lo mas codiciado, sino el saber, el compartir, el dar mas que el recibir, en ultimas donde el amor sea el motor que guíe nuestro diario existir.

 Es necesario desaprender la cultura de la obediencia que encarna el sometimiento y la dependencia para asumir la autonomía personal, escolar y educativa como ejercicio de la libertad en las prácticas sociales de la enseñanza, el aprendizaje y la investigación.
 Es obligatorio desaprender el autoritarismo. Iniciar la búsqueda y construcción de nuevos referentes de convivencia en las prácticas sociales comunitarias y de la democracia escolar. Desaprender el miedo a ser nosotros (a) mismos (a), autores y constructores de futuro y dignidad.
 Es inevitable desaprender los códigos del odio y el resentimiento, el egoísmo y la envidia, la arrogancia y la prepotencia, la injusticia, la desigualdad y la intolerancia, para permitir que florezca la humildad, la sencillez, la colaboración desinteresada, solidaridad, el trabajo en grupo, el respeto por la diferencia y la producción colectiva.
 Es indefectible desaprender los planes de desarrollo que no consultaron las necesidades de la gente para construir relaciones de equilibrio y armonía en lo natural, social, económico, cultural como auténticos planes de vida”[1].
El país necesita unos jóvenes que se formen y trabajen por un mundo de todos y para todos, donde no se haga nada para ellos y nosotros sin ellos y nosotros.

[1] Carlos Medina, Desamores, desaprendizajes y desobediencias. 2005